miércoles, 2 de noviembre de 2016

LOS PETROGLIFOS DEL PEIRÓN O CRUZ DE TÉRMINO DE LA ERMITA DE SANT FRANCESC DE LA FONT (CASTELLÓN DE LA PLANA)

GENTES, COSTUMBRES, TRADICIONES, HISTORIAS, PATRIMONIOS Y PAISAJES DE LA PROVINCIA DE CASTELLÓN:

POR: JUAN E. PRADES BEL (Taller de historia, memorias y patrimonios).

(Sinopsis): RECORDAR TAMBIÉN ES VIVIR…

"LOS GRABADOS CRUCIFORMES DEL PEIRÓN O CRUZ DE TÉRMINO DE LA ERMITA DE SANT FRANCESC DE LA FONT DE CASTELLÓN DE LA PLANA".

Escribe: JUAN EMILIO PRADES BEL.

INTRODUCCIÓN: Un nuevo lugar, con presencia de los enigmáticos cruciformes complejos antropomorfos del tipo “señoritas”; un fenómeno sin resolver. 

EXPOSICIÓN: Dentro del término municipal de Castellón de la Plana se encuentra la ermita rural conocida con el nombre en valenciano de “Sant Francesc de la Font”. La ermita data con anterioridad al año 1748, y fue construida en pleno corazón de la huerta castellonense, sobre la partición natural de las partidas del Cap y la Molinera, quedando el lugar a unos 4 km. distantes de la ciudad de Castellón. Este templo se halla en una intersección de cuatro caminos rurales a doble dirección: Camino de Villamargo, de las villas de Benicasim, de Castellón, del molí de Font la Reina, de Sant Francesc, del Cap, de La Molinera, ...). “Sant Francesc de la Font” queda incluido en el amplio y cuidado recinto protegido del Molí de la Font, lugar vallado, con arbolado, jardines, bancos, fuente y pozo. Contiguo a estos dos lugares y en medio del camino se levanta un peirón rural de piedra o cruz de término (creu de terme), este es un tipo de construcción muy bien definida por el diccionario de la lengua española como un tipo de hito o mojón colocado antiguamente a la entrada o aledaños de las poblaciones junto al paso de los caminos, y también en las proximidades de las ermitas y santuarios, como muestra de piedad por parte del pueblo y para su fomento entre los viajeros. Las cruces de término también marcaban el comienzo de un territorio rural o de un lugar sagrado, y donde se recibían o despedían habitualmente las peregrinaciones. Otras finalidades de las cruces de término: Señalizan vías y caminos. Principalmente avisan de la proximidad de una población. Delimitan los términos municipales o los linderos particulares. Sugieren a los viandantes que recen una oración por el motivo religioso en él representado. Advocan a las ánimas del Purgatorio, o como lugar al que se va a pedir algún favor especial o petición a la divinidad (lluvia, protección de las cosechas, alejamiento de plagas, alejamiento de epidemias, salud, …). En este peirón de “Sant Francesc de la Font”, es de resaltar los petroglifos o símbolos antiguos que se encuentran sobre el pilar de piedra de rodeno, estos fueron grabados en zic-zac a diversas alturas alrededor del fuste que sujeta la cruz del cimacio. Se trata de grabados esquemáticos en número de ocho, uno en cada banda del pilar octogonal, las labras son de trazos sencillos, la composición, al menos en tres de ellos son de la misma autoría, la obra parece querer fusionar una cruz pometada, una letra y una cruz tumularia, unificándose en una amalgama de trazos que juntos conforman la imagen de lo que parece ser una figura humana femenina. Quizá el resultado a la vista no sea solo el mostrar unos graffitis artísticos similares a Lignums Crucis, más bien los enigmáticos grabados antropomorfos sean encubridores o cómplices de otras causas o motivos más espirituales que artísticas. Aparentan ser más bien grabados simbólicos de finalidad o culto y autoría de momento desconocidos, en teoría los cruciformes suelen estar ligados generalmente a todo tipo de promesas, voluntades y a peticiones de protección a la divinidad. Otra de las teorías de trabajo sobre la propia evolución creativa de estos dibujos esquemáticos era la de conseguir un fin. La mano de los autores contempla la ocultación de un tipo de cruz muy concreto, la cruz tumularia. Las cruces tumularias suelen estar compuestas por una cruz y un túmulo que puede adoptar o tener distintas formas geométricas. Su motivación de fábrica es siempre religiosa, dicha iconografía va ligada a los difuntos, el origen de las cruces tumularias proviene de la intención de dejar constancia de las muertes trágicas y violentas ocurridas en el lugar o muy próximas de donde han sido esculpidas y grabadas sobre roca, generalmente suelen guardar en muchos casos la memoria de antiguos finados de siglos pasados, en gran número víctimas mortales por motivos de los duelos ritualizados de honor y de muerte con espadas, armas blancas o pistolas, dichas marcas populares grabadas a modo de petroglifos invitaban e invitan a día de hoy al creyente, a rezar una oración cristiana por la memoria y el eterno descanso del alma de aquel difunto anónimo que no tiene tumba privada, castigado a perpetuidad con la descomulgación, y a permanecer errante en un Purgatorio infinito por su participación en un acto prohibido (el duelo) penado por la justicia y por la iglesia. (JEPB).

ADDENDA: ADICIONES Y COMPLEMENTOS SOBRE LAS TEMÁTICAS Y MOTIVOS REFERIDOS EN EL ARTÍCULO. (POR JUAN EMILIO PRADES):

BIBLIOGRAFIA, WEBGRAFÍA Y FUENTES DOCUMENTALES:

- Ibáñez, Javier; Ortega, Julián; Vidal, Pilar; (1992): “Nuevos conjuntos de grabados esquemáticos en la provincia de Teruel”. Arqueología Aragonesa 1990, Diputación General de Aragón, Zaragoza, 1992, pp. 169-172.

- Ibáñez, Javier; Ortega, Julián; Vidal, Pilar; (1991): “Nuevos conjuntos de grabados esquemáticos en la provincia de Teruel. Tercera campaña”. Arqueología Aragonesa 1991, Diputación General de Aragón, Zaragoza, 1994, pp. 53-56.

- Ibáñez, Javier (2002): “El enigma de las señoritas. grabados antropomorfos sobre soportes históricos”. “Asociación cultural el Tres de Copas”, 6, el “Tres de Copas”, Nogueruelas, 2002, pp. 9-11.

- Aguilar M.C.- Ibáñez, Javier (2006): “Los grabados antropomórficos de los edificios de la provincia de Teruel”. Diario de Teruel, lunes, 2 de octubre de 2006.

-Prades Bel, Juan E. (2016): “Los petroglifos de la antigua iglesia de Benicalaf (Benavites, Valencia)”.

-Prades Bel, Juan E. (2016): “El petroglifo del pórtico del ayuntamiento de Miravete de la Sierra (Teruel, Aragón).

-Margalé Herrero, Rafael y Margalé Alzórriz, Alvaro (2002): Los peirones en las comarcas del Jiloca y campo de Daroca. Calamocha, Centro de Estudios del Jiloca.

-Edo Hernández, Pilar (2007): "Algunas tradiciones y costumbres en torno a los peirones de Bañón", en Cuadernos del Baile de San Roque, 20, pág. 23-46.

-Fuertes Marcuello, Julián (1995): "Los peirones, monumentos característicos de Aragón", en el Boletín de la Casa de Aragón en Madrid, p. 36-39.

-Utrillas Valero, Ernesto (1999): "Los peirones de Visiedo", en Xiloca, 24, pág. 79-111.

-Calvo Berbegal, Ignacio (1988): "Los peirones de Tornos", Xiloca, 2, pág. 45-58.

-Carreras Alvar, Antonio Manuel (1984): "Tornos, un pueblo cargado de peirones", en Narria. Revista de Estudios de Arte y Costumbres Populares, nº 34-35, pág. 7-11.

ARCHIVO FOTOGRÁFICO:




domingo, 30 de octubre de 2016

LOS PETROGLIFOS DE LA ANTIGUA IGLESIA DE BENICALAF

GENTES, COSTUMBRES, FOLKCLORE, TRADICIONES, HISTORIAS, PATRIMONIOS Y PAISAJES DEL CAMP DE MORVEDRE:

Por: JUAN E. PRADES BEL, “Crónicas”, “Humanidades”. (Proyecto: “ESPIGOLANT CULTURA": Taller de historia, memorias y patrimonios).

(Sinopsis): RECORDAR TAMBIÉN ES VIVIR…

(Temáticas): DATOS PARA LA HISTORIA DEL MUNICIPIO DE BENAVITES, MANCOMUNIDAD DE LES VALLS, CAMP DE MORVEDRE.

"LOS GRABADOS CRUCIFORMES ANTROPOMORFOS DE LA ANTIGUA IGLESIA DE BENICALAF EN BENAVITES, VALENCIA".

Escribe: JUAN EMILIO PRADES BEL. ("Las historias escritas que me acompañan, me ayudan a pensar, a imaginar, a vivir, y a experimentar un mundo de vidas muy diferentes a la mía". J.E.P.B.).

INTRODUCCIÓN: Un nuevo lugar, con presencia de los enigmáticos cruciformes antropomorfos del tipo “señoritas”; y un grato recuerdo de un pueblo que estimo que es Benavites. 

EXPOSICIÓN: Benicalaf fue un lugar habitado, que existió de antiguo dentro de lo que es el actual término municipal de Benavites (Valencia, España), pueblo integrado a su vez dentro de la comarca histórica de “La Vall de Segó”, perteneciente en la actualidad a la comarca administrativa valenciana del “Camp de Morvedre”. Benicalaf fue un municipio independiente hasta el año 1856, fecha en que fue anexionado a la villa de Benavites por Real Orden del 14 de abril de 1856 por el motivo de estar el lugar despoblado. 

- En la actualidad del pueblo de Benicalaf sólo subsiste en pie su vieja iglesia parroquial del año 1612, de la que fue su patrón el apóstol Santiago el Mayor. Los servicios de la parroquia fueron suprimidos en el año 1901. La Iglesia de Santiago de Benicalaf fue edificada junto a una intersección de viales o caminos rurales a cuatro direcciones, hallándose en mitad de la huerta del término de Benavites, en el cruce del “Camí d'Uixó” (camino y vía pecuaria de la Vereda) y el “Camí Estret” (camino Estrecho), estando en la actualidad rodeada de campos de naranjos que llegan hasta sus mismos paramentos. El actual “camí d'Uixó” fue la antigua vía ibera y la romana vía Augusta. La iglesia de Benicalaf se construyó en el siglo XVII (año 1612), se trata de un edificio de planta rectangular de una sola nave dividida en tres tramos, más la cabecera, tiene capillas laterales enmarcadas por pilastras. El interior del templo esta muy abandonado, se conservan restos de enlucidos con frescos en los que se representaba la Eucaristía, la Inmaculada, la Santísima Trinidad y el Apostolado. Al exterior, la fábrica es de mampostería en los muros reforzados con sillería en las esquinas, los contrafuertes y en el zócalo. En la fachada se ve una lápida de piedra con la inscripción “STIAGO”. La fachada es recta y se remata con espadaña de tres huecos. 

Protección del monumento: La Iglesia de Santiago de Benicalaf fue declarado Bien de Interés Cultural y Bien de Relevancia Local (número registro 46.12.052-003) por la Generalitat Valenciana. 

- PETROGLIFOS RITUALES: Unas marcas grabadas sobre los sillares de piedra de la fachada de la antigua iglesia de Benicalaf, construida en el año 1612 sobre las ruinas de una antigua mezquita del poblado. Dichas marcas llamaron la atención de este comunicador, las cuales son imágenes simbólicas grabadas sobre las rocas a modo de petroglifos populares dibujando unas formas humanas esquemáticas entremezcladas con cruces, el conjunto ritual aparenta haber sido esculpidos hace más de un siglo con seguridad, muy posiblemente realizado entre los siglos XVII y XVIII. 

- Estos grabados están en varios puntos del edificio, sobre algunos de los sillares del paramento, dispuestos a diferentes niveles en la parte baja del edificio, hallándose a ambos lados de la puerta principal y en las esquinas laterales. No descarto una posible indicación de los autores sobre sus creencias que plasmaron en rituales simbólicos sobre espacios religiosos "iglesia versus mezquita".

- Los grabados que ocupan este tiempo y espacio, son seis, se trata de petroglifos esquemáticos cruciformes, al menos tres de las figuras aparentan haber sido esculpidos por la misma autoría, las labras de trazos improvisados y con pocos medios materiales, las composiciones de trazos sencillos, rústicos y simples, el diseño de los dibujos es cercano a ciertas tipologías próximas a símbolos alquimistas. 

- El resultado llama la atención por la unión simbólica del signo de la cruz con la figura humana, aparentando ser antropomorfos femeninos. Las figuras quizá con connotaciones mitológicas para sus creadores son de gran tamaño y se esculpieron para ser bien visibles en la fachada y paramentos del edificio religioso. 

- Las enigmáticas marcas no revelan sus secretos y significados, pasando a formar parte de un lenguaje oculto y perdido por los ciclos renovadores del tiempo. El lugar, se envuelve en un misterio profundo de signos y unidades autorreferentes, quizá en ensayos de energía libre y pura, practicados en otros tiempos, y posiblemente con conexiones de rituales y duelos a muerte. (JEPB-2009).

ADDENDA: ADICIONES Y COMPLEMENTOS SOBRE LAS TEMÁTICAS Y MOTIVOS REFERIDOS EN EL ARTÍCULO. (POR JUAN E. PRADES):

-(NUEVAS APORTACIONES PARA EL FENOMENO DE LOS GRABADOS TIPO "SEÑORITAS", 2020):

SIMBOLOS DE LIBERTAD: Los nuevos indicios sobre los que trabajo (Juan E. Prades), van abriendo posibilidades de que pudiese existir una estrecha relación cultural entre estos tipos de petroglifos transfigurados de Benicalaf, y otros de similares que he tratado en otros artículos, los cuales a lo largo y ancho de los diversos corredores de expansión, parecen condensar en si ciertas similitudes culturales y a la vez el conjunto alberga diversos cambios evolutivos intencionados en cuanto a la variación de las formas esquemáticas de los dibujos, quizá para adaptarlos tratando de ser aceptados y respetados por la devoción cristiana, estos grabados simbólicos trazados por miembros de algún tipo de gremio o sociedad secreta podrían albergar un mimetismo esquemático intencionado para no ser borrados. Conseguido, el respeto público y eclesiástico hacia estos símbolos populares anónimos, les permitía a sus creadores hacer perdurar su obra y conservar su lenguaje críptico, sin revelar su verdadera naturaleza, sobre este planteamiento trabajo en la teoría de que su origen pueda proceder de los arraigos culturales bereberes llegados con la invasión de Hispania a partir del año 711, un folklore místico que vendría arrastrado desde el norte de África hasta la Península Ibérica, perviviendo al paso del tiempo desde hace siglos a través de un camuflaje simbólico bien visible, pero muy bien disimulado, creado teóricamente por las antiguas sociedades secretas de moriscos conversos de origen cultural bereber que pudieron sobrevivir al triage de expulsión de los moriscos de la península, que ocurrió entre 1609 y 1613. La iglesia de Benicalaf se construyó en el año 1612.

CONCLUSIÓNES: Como conclusión, planteo una posible teoría de que estos tipos de petroglifos puedan haber sido producidos por creyentes descendientes culturales de los antiguos moriscos, que labraron esta expresión cultural sobre la piedra viva de lugares singulares y emblemáticos, sus autores pudieron haber sido algunos supervivientes culturales de años muy posteriores a la expulsión de los moriscos del entorno del año 1613. Estos dibujos, pueden tener su origen en reminiscencias culturales prehistóricas, provenientes de unas costumbres ancestrales conservadas mayormente entre los pueblos Imazighen y bereberes, como es un buen ejemplo el signo de la figura plural Imazighen (en singular: Amazigh), plásticamente es un símbolo prehistórico antropomorfo milenario, un símbolo que para su cultura representa a los humanos que se identifican como hombres libres que defienden con tenacidad su cultura y su tierra.

LOS IMAZIGHEN: Los Imazighen (tradicionalmente esta antiquísima cultura pertenece a los miembros de las tribus beréberes) pueden definirse como el conjunto de pueblos sedentarios que ocupaba desde tiempos remotos, la práctica totalidad del norte de África, desde Siwa en Egipto hasta el océano Atlántico. Sus actividades económicas (comerciantes, ganaderos, agricultores…), sus creencias religiosas (musulmanes, cristianos, judíos, politeístas…). Teniendo en cuenta esta realidad, ser beréber consiste, más que en una etnia, en formar parte de un grupo socio-cultural y lingüístico, cuyos elementos diferenciadores son tener una ascendencia norteafricana y como lengua materna una de las modalidades de la familia de la lengua tamazigh, protagonistas silenciados, desconocidos por las fuentes oficiales de los grandes imperios, los Imazighen son citados de innumerables formas. Su conexión con el Islam les acarreó las transformaciones más radicales que han visto, su arabización les ha diluido y transformado en otro pueblo.

EL IDIOMA AMAZIGH: Los cuatro bloques dialectales principales de Amazigh son el norte, el oeste, el este y el tuareg. La mayoría de los hablantes de amazigh utilizan una de las principales variantes del norte: Riffian, Tamazight y Tashelhit en Marruecos; Kabyle, Chaoui y Mozabite en Argelia.

LA LENGUA TAMAZIGH: El tamazigh es la rama más difundida de las lenguas bereberes. 

LA EXPANSIÓN DEL TERRITORIO AMAZIGH: El territorio tradicional del pueblo Amazigh se llama "Tamazgha" en el idioma Amazigh. Muchos de los habitantes actuales de la región tienen antepasados ​​amazigh, pero después de siglos de arabización, no todos han conservado una herencia cultural y lingüística amazigh. Como resultado, a día de hoy, aquellos territorios de Tamazgha donde poblaciones significativas se reconocen como amazigh, no tienen continuidad territorial, estando separados por áreas donde la mayoría de la gente se considera cultural y lingüísticamente árabe, o por regiones desérticas mayoritariamente despobladas. Estas regiones son el Rif, el Atlas y Souss (en Marruecos), Cabilia, Mzab y Aurès (en Argelia), Djerba (en Túnez), Zuwara y las montañas de Nafusa (en Libia), el oasis de Siwa (en Egipto) y las regiones saharianas y sahelianas pobladas por tuaregs, incluido el antiguo estado Azawad (tuareg y bereber) que abarca Argelia, Libia, Malí, Níger y Burkina Faso pueden ser nombrados entre los territorios más destacados de Tamazgha donde se ha conservado un carácter cultural y lingüístico amazigh. El amazigh es una lengua de la familia afroasiática que se habla en todas las regiones antes mencionadas.

BIBLIOGRAFIA, WEBGRAFÍA Y FUENTES DOCUMENTALES:

- Ibáñez, Javier; Ortega, Julián; Vidal, Pilar; (1992): “Nuevos conjuntos de grabados esquemáticos en la provincia de Teruel”. Arqueología Aragonesa 1990, Diputación General de Aragón, Zaragoza, 1992, pp. 169-172.

- Ibáñez, Javier; Ortega, Julián; Vidal, Pilar; (1991): “Nuevos conjuntos de grabados esquemáticos en la provincia de Teruel. Tercera campaña”. Arqueología Aragonesa 1991, Diputación General de Aragón, Zaragoza, 1994, pp. 53-56.

- Ibáñez, Javier (2002): “El enigma de las señoritas. grabados antropomorfos sobre soportes históricos”. “Asociación cultural el Tres de Copas”, 6, el “Tres de Copas”, Nogueruelas, 2002, pp. 9-11.

- Aguilar M.C.- Ibáñez, Javier (2006): “Los grabados antropomórficos de los edificios de la provincia de Teruel”. Diario de Teruel, lunes, 2 de octubre de 2006.

- Prades Bel, Juan E. (2016): “Los petroglifos de la antigua iglesia de Benicalaf (Benavites, Valencia)”.

- Prades Bel, Juan E. (2016): “Los petroglifos del Puente de Santa Quiteria" de Almazora. 

- Prades Bel, Juan E. (2016): “Los petroglifos del peirón de “Sant Francesc de la Font” en Castellón de la Plana".

- Prades Bel, Juan E. (2016): “El petroglifo del pórtico del ayuntamiento de Miravete de la Sierra (Teruel, Aragón).

- Margalé Herrero, Rafael y Margalé Alzórriz, Alvaro (2002): Los peirones en las comarcas del Jiloca y campo de Daroca. Calamocha, Centro de Estudios del Jiloca.

- Edo Hernández, Pilar (2007): "Algunas tradiciones y costumbres en torno a los peirones de Bañón", en Cuadernos del Baile de San Roque, 20, pág. 23-46.

- Fuertes Marcuello, Julián (1995): "Los peirones, monumentos característicos de Aragón", en el Boletín de la Casa de Aragón en Madrid, p. 36-39.

- Utrillas Valero, Ernesto (1999): "Los peirones de Visiedo", en Xiloca, 24, pág. 79-111.

- Calvo Berbegal, Ignacio (1988): "Los peirones de Tornos", Xiloca, 2, pág. 45-58.

- Carreras Alvar, Antonio Manuel (1984): "Tornos, un pueblo cargado de peirones", en Narria. Revista de Estudios de Arte y Costumbres Populares, nº 34-35, pág. 7-11.

ARCHIVO FOTOGRÁFICO:





lunes, 17 de octubre de 2016

MIRAVETE DE LA SIERRA

GENTES, COSTUMBRES, TRADICIONES, HISTORIAS, PATRIMONIOS Y PAISAJES DE LA PROVINCIA DE TERUEL:

RECORDAR TAMBIÉN ES VIVIR.

Por: JUAN E. PRADES BEL (Taller de historia, memorias y patrimonios).

"UN GRABADO CRUCIFORME DEL TIPO SEÑORITAS EN EL PÓRTICO DEL AYUNTAMIENTO DE MIRAVETE DE LA SIERRA (TERUEL, ARAGÓN)".

Escribe: JUAN EMILIO PRADES BEL.

INTRODUCCIÓN: Un nuevo lugar, con presencia de los enigmáticos cruciformes antropomorfos del tipo “señoritas”; un fenómeno sin resolver.
EXPOSICIÓN: El antiguo Ayuntamiento de Miravete de la Sierra (Teruel, Aragón) está situado en la plaza Mayor o plaza de la Villa, la parte baja del edificio es una antigua lonja de arcos de medio punto, dos frontales y uno lateral, sobre la lonja en la parte superior estaba el antiguo salón de plenos y oficinas municipales de Miravete, este edificio fue construido con piedra sillar y se fecha su construcción en la segunda mitad del siglo XVI. Unas marcas muy erosionadas grabadas sobre una piedra de la fachada del Ayuntamiento llamaron la atención de este comunicador, tratándose de un petroglifo esculpido de antiguo sobre uno de los sillares que conforman la fachada, este fue grabado en alto, por encima del pilar central, y sobre el sillar que apoya en la línea de imposta, en el arranque de fuerza de los dos arcos que soportan el peso de la fachada principal del edificio versátil de antigua lonja y casa consistorial o ayuntamiento. Se trata de un solo grabado esquemático cruciforme de trazo muy sencillo de tipología muy similar a los símbolos alquimistas, a simple vista representa ser un cruciforme antropomorfo femenino, esta figura se esculpió bien visible en la fachada de este edificio público, por su durabilidad en teoría de al menos superior al siglo, hace pensar que este símbolo gozó del consentimiento y conformidad de las autoridades y de la vecindad, puesto que de no ser así es fácilmente destruible y se hubiese borrado con seguridad, por lo que el "graffiti" bien podría ser la marca del cantero de la obra o del que realizó alguna reparación del edificio. Otras teorías apuntan que fuese grabado con la finalidad de señalizar algún hecho o desgracia accidental y trágica ocurrido en dicha plaza (una leyenda cuenta que el grabado es la memoria de un finado caído en un duelo a muerte), o que sea un amuleto para dar algún tipo de protección divina al lugar y a sus vecinos, quizá como petición de algún favor especial o petición a la divinidad (lluvia, protección de las cosechas, alejamiento de plagas, salud, protección contra las pestes y las epidemias…). Muchas son las incógnitas abiertas sobre este grabado, cuyo diseño en si, tiene gran parecido, trazas y partes de símbolos de la antigua alquimia medieval y de la moderna masonería que practica una alquimia de lo espiritual. Un gran maestre Víctor Higuera en su obra “Alquimia y Masonería revela esa práctica de la “alquimia de lo espiritual” (sic): “ La cara oculta de la alquimia, accesible sólo a los iniciados, consiste en adquirir virtudes como la verdad, la perfección del alma, la contemplación de Dios, donde el oro es sólo un símbolo y los alquimistas un eslabón más en la inmensa cadena de los Rosacruces. La masonería afinca su mensaje en símbolos donde no todo el mundo progresa con la misma intensidad. Su cara visible a veces presenta disfraces que ni siquiera los masones pueden comprender y su cara oculta requiere concentración, estudio y discernimiento, para muchas veces coronar con la revelación, el mensaje oculto de su gran secreto. El masón convertido en alquimista de la verdad descubre la piedra filosofal del Logos, su poder, su uso y finalmente la consecuencia de, camino, verdad y vida que reside en ella. La Piedra Filosofal transforma todo a su alrededor, todo lo vil en noble, todo lo que toca lo purifica. Así mismo el masón que ha concluido el tercer estadio, debe tener un efecto multiplicador para convertir el mal en bien, con modestia, clemencia y tolerancia. Consciente de que el Logos reside en él y de que entre él y el Logos no hay diferencia, debe transformar los vicios en virtudes y a los hombres en hermanos, a los ignorantes en sabios, a los hipócritas en sinceros y a los ambiciosos en humildes. Dueño del gran secreto reposa feliz y realizado. La alquimia como la masonería nos enseña a transmutar lo negativo en positivo, el rojo terrenal en azul espiritual que comprenda el negro kármico para transmutarlo también en la blanca aceptación del plan divino. Nos presentan la superioridad del plano espiritual sobre la materia y la fuerza del intelecto sobre la fuerza orgánica del plano físico. Nos hacen ver que el poder de la fuerza no funciona sin la convicción de su eficacia y que la base de todo poder estriba en la creencia y firmeza que justifica su ejercicio, por el alto fin que se persigue. Que todo obstáculo es mental y que en la fe de cada quien reside la fortaleza de sus principios para incluso mover montañas...”.

ADDENDA: ADICIONES Y COMPLEMENTOS SOBRE LAS TEMÁTICAS Y MOTIVOS REFERIDOS EN EL ARTÍCULO. (POR JUAN E. PRADES):

BIBLIOGRAFIA, WEBGRAFÍA Y FUENTES DOCUMENTALES:

-Margalé Herrero, Rafael y Margalé Alzórriz, Alvaro (2002): Los peirones en las comarcas del Jiloca y campo de Daroca. Calamocha, Centro de Estudios del Jiloca.
-Edo Hernández, Pilar (2007): "Algunas tradiciones y costumbres en torno a los peirones de Bañón", en Cuadernos del Baile de San Roque, 20, pág. 23-46.
-Higuera Castellanos, Víctor: “Alquimia y masonería (Piedra Filosofal y Logos)”. Gran Logia Catalunya. Biblioteca: libros sobre masonería. 29-Alquimia y masonería.
-Fuertes Marcuello, Julián (1995): "Los peirones, monumentos característicos de Aragón", en el Boletín de la Casa de Aragón en Madrid, p. 36-39.
-Utrillas Valero, Ernesto (1999): "Los peirones de Visiedo", en Xiloca, 24, pág. 79-111.
-Carreras Alvar, Antonio Manuel (1984): "Tornos, un pueblo cargado de peirones", en Narria. Revista de Estudios de Arte y Costumbres Populares, nº 34-35, pág. 7-11.
-Prades Bel, J.E. (2016): “Los petroglifos del peirón o cruz de término de la ermita de “Sant Francesc de la Font” (Castellón de la Plana).

ARCHIVO FOTOGRÁFICO: